Conmemoramos
hoy a san Isidro Labrador, nacido en Madrid a finales del siglo once. Trabajó
como agricultor en los años de su juventud, al servicio de su patrono Juan
Vargas, u posteriormente en su pequeña hacienda en la ribera del Manzanares.
Contrajo matrimonio con María de la
Cabeza.
Su
memoria nos llega envuelta en piadosa leyenda. La generosidad, compartiendo lo
suyo con los demás, la hospitalidad, desviviéndose por todos, impresionó
profundamente. Murió en Cristo, siendo de edad avanzada y dejando a cuantos le
conocieron el testimonio de su caridad exquisita, motivada por la fe, que él alimentaba
con una constante plegaria.
Su
cuerpo, inhumado junto al de la esposa en el antiguo cementerio de san Andrés
de Madrid, fue trasladado a la catedral de san Isidro, con motivo de la
canonización en el siglo dieciséis.
Isidro
labrador, pobre y humilde, abrió para todos el tesoro de su corazón. Su memoria
perdura en la alabanza de la
Iglesia.
PRIMERA LECTURA
Lectura del libro del Génesis 1, 1-2. 11-13. 26-28
Al principio creó Dios el cielo y la tierra. La tierra era
un caos informe; sobre la faz del abismo, la tiniebla. Y el aliento de Dios se
cernía sobre la faz de las aguas. Y dijo Dios:-«Verdee la tierra hierba verde
que engendre semilla, y árboles frutales que den fruto según su especie y que
lleven semilla sobre la tierra.»Y así fue. La tierra brotó hierba verde que
engendraba semilla según su especie, y árboles quedaban fruto y llevaban
semilla según su especie. Y vio Dios que era bueno. Pasó una tarde, pasó una
mañana: el día tercero. Y dijo Dios:-«Hagamos al hombre a nuestra imagen y
semejanza; que domine los peces del mar, las aves del cielo, los animales
domésticos, los reptiles de la tierra.»Y creó Dios al hombre a su imagen; a
imagen de Dios lo creó; hombre y mujer los creó.Y los bendijo Dios y les
dijo:-«Creced, multiplicaos, llenad la tierra y sometedla; dominad los peces
del mar, las aves del cielo, los vivientes que se mueven sobre la
tierra.»Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL Sal 1, 1-2. 3. 4 y 6 (R.: 2a)
R. Su gozo es la ley del Señor.
Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos,
ni entra por la senda de los pecadores,
ni se sienta en la reunión de los cínicos;
sino que su gozo es la ley del Señor,
y medita su ley día y noche. R.
Será como un árbol plantado al borde de la acequia:
da fruto en su sazón y no se marchitan sus hojas;
y cuanto emprende tiene buen fin. R.
No así los impíos, no así;
serán paja que arrebata el viento.
Porque el Señor protege el camino de los justos,
pero el camino de los impíos acaba mal.
SEGUNDA LECTURA
Lectura de la carta del apóstol Santiago 5, 7-8. 11. 16-18
Tened paciencia, hermanos, hasta la venida del Señor. El
labrador aguarda paciente el fruto valioso de la tierra, mientras recibe la
lluvia temprana y tardía. Tened paciencia también vosotros, manteneos firmes,
porque la venida del Señor está cerca .Llamamos dichosos a los que tuvieron
constancia. Habéis oído ponderar la paciencia de Job y conocéis el fin que le
otorgó el Señor. Porque el Señor es compasivo y misericordioso. Así pues,
confesaos los pecados unos a otros, y rezad unos por otros, para que oscuréis.
Mucho puede hacer la oración intensa del justo. Elías, que era un hombre de la
misma condición que nosotros, oró fervorosamente para que no lloviese; y no llovió
sobre la tierra durante tres años y seis meses. Luego volvió a orar, y el cielo
derramó lluvia y la tierra produjo sus frutos. Palabra de Dios.
R.Aleluya Jn 15, 9b. 5b Permaneced en mi amor -dice el
Señor-; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante.
EVANGELIO:
Lectura del santo evangelio según san Juan 15, 1-7En aquel
tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:-«Yo soy la verdadera vid, y mi Padre es el
labrador. A todo sarmiento mío que no da fruto lo arranca, y a todo el que da
fruto lo poda, para que dé más fruto. Vosotros ya estáis limpios por las
palabras que os he hablado; permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el
sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco
vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el
que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante; porque sin mí no podéis
hacer nada. Al que no permanece en mí lo tiran fuera, como el sarmiento, y se
seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden.Si permanecéis en mí, y
mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que deseáis, y se
realizará.»Palabra del Señor.
El miércoles 15 de mayo, día más importante de nuestras Fiestas Patronales, a partir de las 11:00 h, daba comienzo en la Parroquia San Isidro Labrador la Solemne Misa en honor al Santo Patrono.
Vecinos y vecinas de la localidad y sus aldeas, así como visitantes que
decidieron acompañarnos en estos felices días festivos se congregaron en
el Templo para vivir intensamente cada momento de la Eucaristía.
Una de las ofrendas fue una cuartilla de trigo, todos y cada uno de los párrocos allí presentes derramaron sobre San Isidro, como ofrenda, tradición que tiene en Periana más de doscientos años de antiguedad.
La Misa fue oficiada por nuestro párroco D. Sergiu Alin Pal. Como puede observarse en la imagen adjunta, también asistieron 20 sacerdotes más, entre los que se encontraban D. Antonio Jesús Sosa Mateos (anterior párroco), D. Jesús Isidoro Zorrilla Martín (natal de Periana) y D. Francisco Sánchez Pérez (Arcipreste de la Axarquía Interior).
Destacamos los diversos actos en los que se estructuró la liturgia:
- Entrada
- Semblanza a San Isidro
- Lecturas y Salmo
- Peticiones
- Homilía
- Ofrendas
- Credo
- Padre Nuestro
- Paz
- Comunión
- Himno a San Isidro
El Coro Rociero Camino de Olivares y la Banda de Música Municipal de Periana participaron en los actos anteriormente citados.
Los Mayordomos 2013 agradecieron la incansable colaboración prestada por vecinos y vecinas de Periana y sus Aldeas, comercios e instituciones municipales.
Se nombraron a los Mayordomos 2014:
- Avilés Zorrilla, Mª Carmen
- Benítez Benítez, Paqui
- Calderón Negro, José Isidro
- Calderón Negro, Mª Prudencia
- España Fernández, Miguel Ángel
- Mateos Madrid, Antonio
- Molina Caro, Rocío
- Molina Solórzano, Elías Rafael
- Mostazo Pareja, Cristina
- Oviedo Calderón, Juan de Dios
- Oviedo Pérez, Verónica
- Pareja Moreno, Jéssica
- Retamero Barcos, Lourdes
- Ríos Gallego, Alicia
- Ruiz Retamero, Mª Isabel
Con la ocasión de la celebración de ingreso como párroco de D. Sergiu-Alin Pal aprovechó la ocasión para invitar a sus compañeros de Rumanía, y compartir junto a ellos de la celebración de San Isidro. Participaron en la Misa de San Isidro los siguientes párrocos:
D. Antonio Jesús Sosa
D. Francisco Sánchez Pérez
D. Jesus Zorilla Martin
D. Liviu Marian Bulai
D. Ștefan Bortă
D. Laurențiu Dăncuță
D. Eduard Păduraru
D. Ioan Balan
D. Mihai Savin
D. Staszkovian Andrei
D. Lucian Adam
D. Adrian Bulai
D. Emil Robu
D. Cristinel Gal
D. Adrian Blăjuță
D. Paul Fechetă
D. Gabriel Trișcă
D. Vasile Ureche
D. Sergiu Alin Pal
POESÍA
A LOS MAYORDOMOS
El día quince de Mayo
cuando se celebra la misa a nuestro patrón
nombran los mayordomos
del año posterior.
Todos son gente humilde
sencilla como los demás
que para organizar estas fiestas
se lo tienen que currar.
Se encuentran con muchos problemas
los que tienen que solucionar
así que durante todo el año
tienen mucho que trabajar.
Lo hacen sin interés
porque San Isidro le mueve su fe
trabajan día y noche
buscando lo que hacer.
Hacen todas las fiestas del pueblo
para poder recuperar
ese dinero tan difícil
que luego van a necesitar.
Venden lotería en navidad
recorren las casas para pedir
aunque haya gente que estas cosas
no las vean así.
Pensemos que los
mayordomos
siempre intentan hacer lo mejor
y el ser mayordomo es tan antiguo
como San Isidro, nuestro Patrón.
Porque si no fuera por los mayordomos
estas fiestas se perderían
y los más antiguos de nuestro pueblo
jamás nos lo perdonarían.
Mayordomos, organizar vuestra fiesta
echadle vuestra ilusión
que si todos le ponéis vuestra garra
siempre os saldrá lo mejor.
Que Periana esté con los mayordomos
pero que sea todos a una
porque fiesta como la de San Isidro
jamás habrá ninguna.
Así que vamos a la fiesta todos
y vamos con alegría
que los que apoyamos a los mayordomos
somos la mayoría.
Y San Isidro bendito
nos dé a todos su bendición
para que le ayudemos a los mayordomos
a que sigan esta tradición.
Pepe Moreno Oviedo (Pepe la Adela)
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