Sur.es 7/11/2009
El proyecto documentará las fiestas, expresiones, oficios milenarios y recetas culinarias que conforman la identidad andaluza.
'Identidad'. Dícese del conjunto de rasgos propios de un individuo o colectividad que los caracterizan frente a los demás. Son señas únicas, prolongadas en el tiempo y, en muchos casos, intangibles: se ven, se oyen, se sienten... pero no se tocan. Y en Andalucía sobran los ejemplos: la danza de los cascabeleros de Alosno, los trovos de la Alpujarra, los verdiales de Málaga, los carnavales de Cádiz, las Cruces de Mayo, la artesanía del esparto, la producción de aguardiente y un largo etcétera forman parte de ese legado cultural inmaterial que definen a la comunidad y que, en muchos casos, amenaza el paso del tiempo. Por primera vez, un atlas rastreará y registrará todas esas manifestaciones y expresiones «para conocer con precisión qué ha ocurrido en tiempos pasados y tratar de que en el futuro se sigan manteniendo, si no en la cotidianeidad, sí al menos en la documentación», en palabras de la consejera de Cultura, Rosa Torres.
Antropólogos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico trabajan en la elaboración de esta «cartografía de lo inmaterial» recopilando información y documentos audiovisuales en cuatro campos: rituales festivos, oficios y saberes, modos de expresión y alimentación y cocina. El objetivo: «avanzar en la protección de un legado único, que no se olvide aunque esté en desuso».
El Atlas del Patrimonio Cultural de Andalucía culminará en 2012 y, para entonces, se prevé contar con alrededor de 3.000 registros representativos de «las herencias del pasado y las realidades contemporáneas» de la comunidad. El resultado se editará en papel y se utilizará para la realización de documentales y microespacios televisivos que den a conocer esas expresiones culturales.
En la Axarquía
El proyecto se encuentra en la primera fase -serán cinco-, para la que se han identificado 62 zonas culturales sobre las que trabajar. De momento, en lo que va de año, se han recogido datos de once áreas, correspondientes a 21 comarcas y a 339 municipios. De ellos, el atlas recogerá 587 entradas. Así por ejemplo, de la Axarquía se dejará constancia de las fiestas de la Semana Santa de Frigiliana e Iznate, el Corpus de Benamargosa, la feria del ganado de Almáchar, los verdiales al estilo Comares y la elaboración de los panderos, la actividad de los paseros, el oficio de los ceramistas de Vélez Málaga y la labor de los espeteros de Torre del Mar.
Y habrá más. Entre ellos, estará «el arte más universal de Andalucía: el flamenco», según apuntó la consejera. De hecho, tras la presentación del atlas, Rosa Torres y el presidente de la Diputación de Málaga, Salvador Pendón, presidieron en el Museo Picasso el primer acto provincial de apoyo a la candidatura a la Unesco del flamenco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Una veintena de peñas y artistas como Carrete de Málaga o Rocío Bazán firmaron la carta de adhesión; mientras que medio centenar de alcaldes y representantes municipales (de Málaga, Ronda, Vélez Málaga, Alhaurín, Archidona, Antequera, Periana, Nerja...) se comprometieron a presentar una moción en sus ayuntamientos para mostrar su respaldo. De momento, el expediente ya ha sido aprobado por la Unesco, que lo estudiará a lo largo del próximo año. Primera prueba, superada.
Antropólogos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico trabajan en la elaboración de esta «cartografía de lo inmaterial» recopilando información y documentos audiovisuales en cuatro campos: rituales festivos, oficios y saberes, modos de expresión y alimentación y cocina. El objetivo: «avanzar en la protección de un legado único, que no se olvide aunque esté en desuso».
El Atlas del Patrimonio Cultural de Andalucía culminará en 2012 y, para entonces, se prevé contar con alrededor de 3.000 registros representativos de «las herencias del pasado y las realidades contemporáneas» de la comunidad. El resultado se editará en papel y se utilizará para la realización de documentales y microespacios televisivos que den a conocer esas expresiones culturales.
En la Axarquía
El proyecto se encuentra en la primera fase -serán cinco-, para la que se han identificado 62 zonas culturales sobre las que trabajar. De momento, en lo que va de año, se han recogido datos de once áreas, correspondientes a 21 comarcas y a 339 municipios. De ellos, el atlas recogerá 587 entradas. Así por ejemplo, de la Axarquía se dejará constancia de las fiestas de la Semana Santa de Frigiliana e Iznate, el Corpus de Benamargosa, la feria del ganado de Almáchar, los verdiales al estilo Comares y la elaboración de los panderos, la actividad de los paseros, el oficio de los ceramistas de Vélez Málaga y la labor de los espeteros de Torre del Mar.
Y habrá más. Entre ellos, estará «el arte más universal de Andalucía: el flamenco», según apuntó la consejera. De hecho, tras la presentación del atlas, Rosa Torres y el presidente de la Diputación de Málaga, Salvador Pendón, presidieron en el Museo Picasso el primer acto provincial de apoyo a la candidatura a la Unesco del flamenco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Una veintena de peñas y artistas como Carrete de Málaga o Rocío Bazán firmaron la carta de adhesión; mientras que medio centenar de alcaldes y representantes municipales (de Málaga, Ronda, Vélez Málaga, Alhaurín, Archidona, Antequera, Periana, Nerja...) se comprometieron a presentar una moción en sus ayuntamientos para mostrar su respaldo. De momento, el expediente ya ha sido aprobado por la Unesco, que lo estudiará a lo largo del próximo año. Primera prueba, superada.
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