Hace años los benamocarreños iban andando a todos lados (como mucha gente), para ir a Vélez tenían que pasar el río Vélez que solía ir con mucha agua. Esta foto muestra uno de esos momentos. Se construyó finalmente un puente gracias al Párroco Don José Barroso que entonces estaba en Benamocarra, inmejorable cura y buenísima persona, natural de Periana.
Primera imagen ofrecida por José Verdugo y la segunda y texto ofrecido por Mª José Quero González, gracias por colaborar con este blog y aportarnos pequeños detalles tan curiosos.
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"Don José Barroso llega como cura a Benamocarra acompañado de su madre el 24 de octubre de 1963, donde permaneció durante casi 6 años. Sobre él hay montones de anécdotas y sigue siendo muy recordado por los benamocarreños a pesar de que mucho ha llovido desde entonces. No obstante tenemos una calle en nuestro pueblo que lleva su nombre y me consta que no es la única en la provincia. Uno de los motivos que tenemos para estarle agradecidos el pueblo benamocarreño es la construcción del puente sobre el río Vélez.
En las épocas de lluvia (y por aquel entonces eran más abundantes y duraderas) la gente que se desplazaba a Vélez-Málaga debía sortear el río Vélez, para lo que se utilizaban los llamados vadeadores. Los vadeadores eran personas que se encargaban de subir a sus espaldas a la gente que debía cruzar el río de forma que no se mojaran, por ello recibían una cantidad de dinero que seguro era pequeñísima. De ello ha quedado constancia fotográfica". (Mi abuelo como cartero del pueblo debía pasarlo todos los días lloviera o no).
"En una ocasión su gran amigo el periodista malagueño Alejo García vino a visitarle, aprovechando que era director de un periódico en Madrid le dijo que le comentara algo significativo del pueblo para publicarlo. Ahí don José Barroso aprovechó la ocasión y le habló sobre el problema del puente, proporcionándole fotos sobre el río y los vadeadores (también era un gran aficionado a la fotografía). Finalmente la noticia se publicó en primera plana levantando mucha controversia ya que no sólo constataba el estado de abandono en el que estaba el pueblo, sino también cómo se podía permitir que algo así ocurriese. Y es que si bien el puente estaba proyectado construirlo desde hacía tiempo como bien le comentó un oficial del ayuntamiento de Vélez-Málaga en una de sus muchas gestiones para solicitar su construcción (término municipal en el que están tanto el río como el puente), "iba a paso de tortuga, pero desde la publicación de la noticia se ha agilizado enormemente". Sin embargo lo construyeron mal y se cayó, por lo que hubo que rehacerlo una segunda vez.
A partir de entonces se estableció con normalidad el tráfico hacia Vélez-Málaga y viceversa aunque aquí de broma se comentara hasta hace poco que desde que se construyó el puente no llueve en condiciones".
Agradecer esta pequeña redacción a Mª José Quero González, por compartir con todos nosotros historias de personas importantes de nuestro pueblo de Periana.
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