Adiós: Enrique “Padilla”
Enrique “Padilla” forma parte de las personas que abandonan este mundo de manera silenciosa con un adiós doloroso de amigos y familiares y la marcha hace pensar en la existencia de un Dios que los acoge en un descanso eterno de bienestar, recompensa a una vida importantísima porque los pueblos existen gracias a hombres entregados de pleno a su familia, haciendo pueblo cada día sin desfallecer.
Por la generosidad enseñorean un gesto de alegría, satisfacción que los hace dignos de unas líneas de recuerdo en este caso a Enrique ”Pailla”, un hombre que a ciencia cierta alguna vez lo encontraron en el autobús del viaje a Vélez; marchaba con frecuencia por negocios, mejor dicho: ejercía la compra y venta, pequeñas cantidades, no ambicionaba mucho; Enrique, era una persona familiar, abierta al trato con el inconveniente de un hablar dificil de entender porque cuando conversaba ahorraba palabras sabiendo que para entenderse sobra la palabrería, tampoco necesita hablar mucho Enrique para comprar el cacharro inútil que sobra en casa y al guiri le encandila y gustoso lo compra.
Fueron los trapicheos de “Pailla” y así ganaba una cantidad lo suficiente para que a su mujer e hijos no le faltara ni gloria, sin derrochar, ni tirar el dinero, eso no entraba en la mente de “Pailla”, prefería pequeños caprichos para él y los suyos que aprendían a encontrar en el ahorro la felicidad reflejada en el rostro de Enrique, uno de tantos hombres sencillos y honrados que posibilitan un encantador Periana repleto de gratos recuerdos de charlas intrascendentales que hacen pasar el rato agradable rodeado de paisanos.-
Hasta siempre Enrique //J. Perianes
Agradezco la colaboración de J. Perianes por el interés mostrado y por su colaboración y contribución a este blog y a la familia de Enrique que ha colaborado en las imágenes que adornan esta bonita historia que permanecerá en el recuerdo de todos los perianenses.
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