01/04/2024 - www.diariosur.es
Las abundantes precipitaciones registradas en la provincia de Málaga durante esta recién terminada Semana Santa siguen ofreciendo imágenes históricas y para la esperanza, alejando un poco, siquiera levemente, el fantasma de la extrema sequía y dando un auténtico balón de oxígeno a la economía malagueña en general, desde el turismo a la agricultura.
Una de las estampas más llamativas es la que se ha producido a primera hora de la mañana de este lunes en el nacimiento del río Guaro, en el término municipal de Periana. Como dicen los perianenses, 'ha salido' el Guaro o 'ha reventado' el río. Después de ocho años sin hacerlo, ya que el anterior precedente se registró en 2016, se ha producido un 'reventón' del que está considerado el principal aporte al embalse de La Viñuela.
La presa axárquica, de la que se abastecen 14 municipios y hasta octubre de 2022 las más de 6.400 hectáreas del Plan Guaro, ha sumado ya una decena de hectómetros cúbicos, hasta situarse a las 20.00 horas de este lunes en el 16,21% de su capacidad, con 26,64 hectómetros cúbicos almacenados, frente a los 16,52 que tenía el pasado Lunes Santo a esta misma hora.
El 'reventón' del Guaro es muy visible en la puerta de la bocamina donde se sitúan los dos sondeos que se usan para extraer agua para el consumo y el riego en Periana. «El vaso se ha llenado», ha ejemplificado este lunes a SUR el alcalde perianense, Rafael Torrubia, visiblemente «satisfecho» por el cambio de tendencia tras las abundantes lluvias, que han dejado 172 litros en el casco urbano en los últimos siete día y más de 260 en la vecina Zafarraya, en la provincia de Granada, de donde se nutre el nacimiento para llenarse.
De momento, este 'reventón' del Guaro va a permitir suprimir las restricciones de agua que mantenían media docena de aldeas de Periana los domingos, como Pollo Pelao, La Muela, Cortijo Blanco o La Estación, entre otras, cuando se cortaba el suministro para posibilitar el llenado de los depósitos municipales y ahorrar así agua. También los agricultores locales van a poder tener recursos en los próximos meses, tras dos veranos en blanco, sin agua del Guaro para sus fincas de hortícolas, cítricos, melocotones y subtropicales.
'El 'polje' de Zafarraya
«Todo son noticias positivas, ahora vamos a poder abastecernos del agua sin usar las bombas de los sondeos, porque sale por su propio pie, por lo que ahorraremos electricidad durante unos meses», ha detallado el regidor perianense, quien ha destacado que la mayor parte del agua acabará en el pantano de La Viñuela. «Si le han entrado ya diez hectómetros calculo con pueden entrarle otros diez más en las próximas semanas», ha vaticinado.
En los últimos días los lugareños y vecinos de Periana ya vaticinaban que este fenómeno natural se iba a producir. Así, el regidor publicó este domingo en sus redes sociales un vídeo en el que aseguraba que «la señal de que el Guaro está a punto de salir la da la Isla con su nacimiento y eso se ha producido hoy, pronto saldrá Guaro». Asimismo, aportaba una serie de explicaciones de la geología del llamado 'polje' y los sumideros de Zafarraya a partir de las explicaciones de un vecino, gran experto en la materia, Juan Miguel Ortigosa.
«Geológicamente, el Llano de Zafarraya conforma un 'polje' de naturaleza kárstica, con un relleno de aluvión de entre 40 a 80 metros de grosor, sobre un subsuelo de calizas fracturadas que suponen el acuífero profundo. Cuando llueve, las aguas van saturando acuíferos y completando niveles freáticos», ha detallado el regidor de Periana.
«Las aguas del Llano, curiosamente vierten a dos cuencas: de este a oeste, la parte norte o cuenca del arroyo de La Madre, que por los sumideros, vierte a la cuenca del Guadalquivir, a través de las surgencias de Riofrío, Manzanil o Salar y de este a oeste, parte sur o cuenca de la Madre de la Brígida, que desde los sumideros del Alcachofar, vierte sus aguas a la cuenca mediterránea, a través del nacimiento de Guaro, en el embalse de La Viñuela», ha apostillado Torrubia, al tiempo que ha destacado como en los últimos 30 años, «un aliviadero en el cauce de La Madre a la altura de Pilas de Algaida, vierte aguas de la cuenca norte, directamente al embalse de La Viñuela».
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